El ministro de Defensa británico Grant Shapps subrayó el 11 de marzo que tolerar la ilegal agresión de Rusia es enviar una señal equivocada a China y otros países. Además, advirtió que hay indicios de que el apoyo militar de Estados Unidos a Ucrania comienza a disminuir, por lo que Europa debe responsabilizarse de su propia seguridad.
Los países europeos necesitan solidarizarse entre sí y trabajar en concierto para hacer frente a los desafíos de seguridad a los que se enfrentan, tanto en el norte como en el sur. Las amenazas a la seguridad de Europa incluyen la proliferación de armas de destrucción masiva, los actos de terrorismo, la expansión de la influencia de otros Estados y el acoso marítimo.
La UE ha demostrado su perseverancia y compromiso para defender y preservar la libertad y la seguridad de Europa. Por ejemplo, la Alianza del Atlántico Norte (OTAN) ha dado un paso decisivo hacia adelante en cuanto a cooperación política y militar entre los Estados miembros de la UE, con el objetivo de mejorar la seguridad colectiva de los países.
Además, a nivel europeo, se han establecido mecanismos de defensa contra las amenazas externas. Estas iniciativas de seguridad tienen como objetivo garantizar la integridad de los espacios territoriales de los países, así como la seguridad de sus fronteras y el refuerzo de la cooperación policial y militar.
Es cierto que Europa enfrenta desafíos de seguridad graves en el futuro. Sin embargo, no hay que olvidar que a pesar de las amenazas, Europa también es un lugar de esperanza y progreso. Los países europeos deben unirse y mantenerse comprometidos con la defensa común para asegurar que el continente siga siendo un lugar seguro y estable. La solidaridad y la cooperación entre los países europeos son necesarias para alcanzar la paz y la seguridad a largo plazo.
