El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, había prometido hacer públicos todos los archivos secretos relacionados con el asesinato del presidente John F. Kennedy. Sin embargo, la última entrega de archivos por parte del Archivo Nacional de Estados Unidos el día 18 de este mes ha dejado a todos sorprendidos y decepcionados.
Durante décadas, el asesinato de JFK ha sido un tema de gran interés y controversia en Estados Unidos. El presidente Kennedy fue asesinado en Dallas, Texas, el 22 de noviembre de 1963, mientras viajaba en un automóvil descapotable junto con su esposa Jacqueline Kennedy. A pesar de que el autor del asesinato, Lee Harvey Oswald, fue arrestado y acusado del crimen, muchas teorías de conspiración han surgido a lo largo de los años, cuestionando la versión oficial de los hechos.
En 1992, el Congreso de los Estados Unidos aprobó la Ley de Divulgación de Registros de Asesinatos de JFK, que establecía que todos los registros relacionados con el asesinato debían ser desclasificados y hechos públicos en un plazo de 25 años. Este plazo expiró el 26 de octubre de 2017, y el presidente Trump prometió hacer públicos todos los archivos restantes.
Sin embargo, cuando el día llegó, el Archivo Nacional de Estados Unidos solo publicó una parte de los archivos restantes. La excusa fue que el FBI y la CIA habían solicitado que algunos documentos se mantuvieran clasificados por motivos de seguridad nacional. Esta decisión ha generado una gran controversia y descontento entre los ciudadanos estadounidenses, que esperaban finalmente conocer la verdad sobre la muerte de su presidente.
Además, los archivos que fueron publicados no revelaron ninguna información significativa o nueva sobre el asesinato de JFK. Muchos expertos y teóricos de la conspiración han expresado su decepción y han calificado esta última entrega de “insuficiente” e “inútil”. Algunos incluso han acusado al gobierno de continuar encubriendo la verdad y protegiendo a los verdaderos responsables del asesinato.
Esta situación ha generado una gran frustración y desilusión en la población estadounidense. Durante décadas, han esperado ansiosamente que se haga justicia y se revele la verdad sobre la muerte de su amado presidente. Sin embargo, una vez más se han quedado con las manos vacías y con más preguntas que respuestas.
A pesar de todo, hay quienes mantienen la esperanza de que algún día se revelará la verdad y se hará justicia para JFK y su familia. Mientras tanto, es importante recordar y honrar la memoria de un gran líder y un hombre que dejó un legado imborrable en la historia de Estados Unidos.
En conclusión, la última entrega de archivos relacionados con el asesinato de JFK ha dejado a todos decepcionados y con más incógnitas que respuestas. Sin embargo, no debemos perder la esperanza de que algún día se hará justicia para el presidente Kennedy y su familia. Mientras tanto, su legado y su memoria seguirán viviendo en nuestros corazones.