¡El pollo frito no solo es delicioso, ahora también puede ser utilizado para “cepillar” tus dientes! La famosa cadena de comida rápida estadounidense KFC se ha unido con la marca de pasta dental Hismile para lanzar al mercado una novedosa crema dental con sabor a pollo frito.
Esta colaboración ha causado gran revuelo en las redes sociales y ha generado opiniones divididas entre los usuarios. Algunos se muestran entusiasmados con la idea de tener un aliento a pollo frito todo el día, mientras que otros lo consideran un producto poco higiénico y poco saludable.
Sin embargo, el objetivo de esta crema dental no es solo proporcionar un aliento agradable, sino también mejorar la salud bucal. Según KFC, la pasta dental contiene ingredientes que ayudan a fortalecer el esmalte de los dientes y a prevenir la caries. Además, su sabor a pollo frito es 100% natural y no contiene azúcares añadidos.
Pero, ¿cómo surgió esta idea tan peculiar? Según los representantes de ambas marcas, todo comenzó como una broma interna en una reunión de negocios. Sin embargo, al ver la reacción positiva de las personas, decidieron llevarla a la realidad y lanzarla al mercado.
La crema dental con sabor a pollo frito ya se encuentra disponible en algunas tiendas selectas de Estados Unidos y se espera que pronto llegue a otros países. Además, KFC también ha lanzado una línea de cepillos de dientes con diseños inspirados en sus famosos cubos de pollo frito.
Esta colaboración entre dos marcas tan diferentes ha generado un impacto en la industria de la alimentación y la salud bucal. Y es que, en un mundo donde la competencia es cada vez más fuerte, la innovación y la creatividad son clave para destacar y atraer a los consumidores.
Así que ya sabes, si eres amante del pollo frito y quieres probar algo nuevo, ¡esta pasta dental es para ti! Y si no te convence del todo, no te preocupes, siempre puedes seguir disfrutando de un buen cubo de pollo frito de KFC como de costumbre. ¡La elección es tuya!
En definitiva, esta colaboración entre KFC y Hismile es una muestra de que las posibilidades son infinitas cuando se trata de innovar y sorprender a los consumidores. Y quién sabe, tal vez en un futuro no muy lejano, podamos encontrar en el mercado más productos de este tipo que nos hagan sonreír y cuidar nuestra salud al mismo tiempo. ¡A comer y cepillarse los dientes se ha dicho!
