El Parlamento Europeo aprobó el pasado 2 de julio una resolución sobre la evaluación de la política exterior y de seguridad de la Unión Europea. En este documento, se condenan las acciones coercitivas de China en el estrecho de Taiwán y en el Mar del Sur de China. También se critica al líder chino, Xi Jinping, por no renunciar a sus declaraciones sobre el uso de la fuerza contra Taiwán y se enfatiza que el uso de medidas coercitivas para lograr la unificación de ambos lados del estrecho va en contra del derecho internacional.
Esta resolución del Parlamento Europeo es una clara muestra del rechazo de la Unión Europea a las acciones agresivas de China en la región. En ella se denuncia la falta de respeto por la soberanía y la integridad territorial de otros países, así como la violación de los derechos humanos y la libertad de navegación en aguas internacionales.
El Parlamento Europeo también ha expresado su preocupación por las declaraciones del presidente Xi Jinping, quien ha afirmado en varias ocasiones que no descarta el uso de la fuerza para lograr la reunificación con Taiwán. Esta postura es considerada una amenaza para la paz y la estabilidad en la región, y va en contra de los principios de la Unión Europea de resolución pacífica de conflictos y respeto por el derecho internacional.
Además, se ha hecho hincapié en que el uso de medidas coercitivas para lograr la unificación de Taiwán con China es una violación de los derechos humanos y la democracia, ya que va en contra de la voluntad del pueblo taiwanés. La Unión Europea defiende la importancia de respetar la libre determinación de los pueblos y el derecho a decidir su propio futuro.
Por otra parte, la resolución del Parlamento Europeo también condena las acciones de China en el Mar del Sur de China, donde ha construido islas artificiales y ha aumentado su presencia militar, violando así la soberanía de otros países de la región. Estas acciones han generado tensiones y preocupaciones en la comunidad internacional, y la Unión Europea ha instado a China a respetar el derecho internacional y a buscar soluciones pacíficas a las disputas territoriales.
En resumen, la resolución del Parlamento Europeo es una clara muestra del compromiso de la Unión Europea con la paz, la estabilidad y el respeto por el derecho internacional en la región de Asia-Pacífico. Se espera que China tome en cuenta estas preocupaciones y adopte medidas para mejorar sus relaciones con sus vecinos y la comunidad internacional en general. La Unión Europea seguirá trabajando para promover el diálogo y la cooperación en la región y para garantizar un futuro pacífico y próspero para todos los países.
