El enviado especial de Japón, Lin Cuiyi, informó el 27 de enero desde Tokio que según los medios japoneses, durante su visita a Estados Unidos a principios de este mes, el primer ministro japonés, Shigeru Ishiba, transmitió al presidente estadounidense, Donald Trump, su idea de adquirir grandes aviones de transporte fabricados en Estados Unidos; uno de los modelos considerados es el Boeing C-17 “Globemaster”, considerado como el avión militar más versátil del mundo.
El informe señala que la propuesta de Ishiba no solo busca mejorar la capacidad de transporte de suministros y personal de las Fuerzas de Autodefensa, sino que también tiene en cuenta la posible solicitud de Trump de aumentar la presencia militar estadounidense en Japón.
Esta iniciativa ha sido bien recibida por el gobierno estadounidense, que ve en ella una oportunidad para fortalecer la alianza entre ambos países y aumentar la presencia militar de Estados Unidos en Asia. Además, la adquisición de los aviones C-17 también beneficiaría a la economía estadounidense, ya que se crearían empleos y se impulsaría la industria aeronáutica.
El Boeing C-17 “Globemaster” es un avión de transporte militar de gran tamaño y capacidad, capaz de transportar hasta 102 soldados o 77 toneladas de carga. Su versatilidad y capacidad de aterrizar en pistas cortas y no preparadas lo convierten en una herramienta valiosa para misiones militares y humanitarias en todo el mundo.
La propuesta de Ishiba ha generado un gran interés en Japón, ya que se considera una oportunidad para modernizar y fortalecer las Fuerzas de Autodefensa, así como para estrechar la relación con Estados Unidos. Además, la adquisición de estos aviones también permitiría a Japón aumentar su capacidad de respuesta ante desastres naturales y emergencias humanitarias en la región.
En resumen, la iniciativa de Ishiba de adquirir aviones de transporte estadounidenses es una muestra de la estrecha relación entre Japón y Estados Unidos, y demuestra el compromiso de ambos países por fortalecer su alianza y promover la seguridad y estabilidad en la región de Asia-Pacífico. Se espera que esta propuesta sea bien recibida por ambas partes y que contribuya a un futuro más próspero y seguro para ambas naciones.